Organizaciones de pacientes y particulares firmaron una carta al Ministro de Salud de la Nación, Dr. Mario Lugones, solicitando que se reconsidere la decisión de retirar a la Argentina de la Organización Mundial de la Salud – OMS.

 

Compartimos el contenido. La carta se puede descargar en este enlace.

 

Asunto: Solicitud de reconsideración ante el anuncio de retiro de la República Argentina de la OMS y no adhesión a compromisos internacionales claves en salud y discapacidad.

 

De nuestra mayor consideración:

 

Desde la Alianza Argentina de Pacientes – ALAPA, asociación civil sin fines de lucro que representa a personas y familias afectadas por enfermedades poco frecuentes, genéticas, crónicas y discapacitantes y que agrupa a más de 100 organizaciones de pacientes de la Argentina, nos dirigimos a usted para expresar nuestra profunda preocupación ante el anuncio presidencial de retirar a la República Argentina de la Organización Mundial de la Salud (OMS), y por la no adhesión del país a compromisos internacionales fundamentales en salud, como la reciente Declaración de Berlín de la Cumbre Mundial sobre Discapacidad 2025.

 

Como organización que trabaja con poblaciones especialmente vulnerables dentro del sistema de salud, entendemos que la condición de Estado Miembro de la OMS no es solo una cuestión formal, financiera o simbólica meramente diplomática. Implica formar parte activa de un sistema global de cooperación sanitaria, acceso a marcos normativos basados en evidencia, participación en redes de vigilancia epidemiológica y colaboración en la elaboración de políticas públicas centradas en la equidad, la inclusión y los derechos humanos.

 

La reciente aprobación por parte de la OMS de una resolución liderada por España y Egipto que declara a las enfermedades raras como una prioridad sanitaria global, representa un hito histórico para millones de personas en todo el mundo.

En la Argentina se estiman entre 3,5 y 4 millones de personas con enfermedades poco frecuentes, de los cuales casi 70% son niños. El 30% de ellos no sobrevivirán a los 5 años y otro 30%, no sobrevivirán a los 18 años. Implica un millón y medio de muertes infantiles y adolescentes por EPOF. Esto refleja la importancia de la declaración aprobada este sábado por la OMS.

 

El documento insta a los Estados a desarrollar un plan de acción integral para mejorar el diagnóstico oportuno, el tratamiento adecuado, la investigación y el abordaje multidimensional de estas condiciones y patologías. Su adopción no solo constituye un avance técnico y científico, sino también una declaración política y ética en favor de quienes han sido históricamente invisibilizados.

 

La no adhesión de la Argentina a este instrumento, y la falta de expresión de apoyo a la Declaración de la Cumbre Mundial sobre Discapacidad de Berlín, representan retrocesos que contradicen los principios de progresividad, no discriminación y no regresividad en materia de derechos humanos. Argentina no puede quedar al margen de estas discusiones y decisiones. Retirarse de la OMS significaría renunciar a la posibilidad de incidir en políticas sanitarias internacionales, aislarse de redes de cooperación científica y limitar las oportunidades de acceder a tecnologías, medicamentos y estrategias de prevención fundamentales para la salud pública nacional. La OMS y la cooperación internacional representan mucho más que un respaldo técnico: son fuentes de legitimidad, visibilidad y protección. No debemos debilitar las garantías institucionales que sostienen el derecho humano a la salud, que hoy les otorga, a estas personas, reconocimiento y esperanza.

 

Por todo lo expuesto, solicitamos respetuosamente que se reconsidere el retiro de Argentina como estado miembro de la OMS y que se evalúe la urgente adhesión a la resolución sobre enfermedades raras y a los compromisos de la Cumbre de Berlín, entendiendo que la salud requiere articulación internacional, compromiso con los organismos que promueven el bienestar colectivo, y responsabilidad con los sectores más vulnerables de nuestra sociedad. Hacerlo sería un acto de justicia para con estos sectores y un paso necesario hacia una política de salud pública digna, participativa y alineada con los estándares internacionales de derechos humanos.

 

Desde ALAPA reiteramos nuestra disposición a colaborar con el Ministerio de Salud de la Nación en todas las instancias necesarias para construir un sistema de salud más justo, inclusivo y solidario, que no deje a nadie atrás y que ubique a las personas más vulneradas en el centro de las decisiones públicas.